Thursday, December 21, 2006

el sol hiere de belleza nuestros párpados.

el aire nos rodea como lenguas de fuego, su voracidad estival apenas si a veces cae, momentáneamente vencida, a los pies de algún compasivo frescor, estos días.

un poco entre líneas y un poco a los gritos uno sospecha que vivir es una suerte de flujo interminable e incomenzado. acaso esto sea magna suerte o la peor tragedia; hace rato que personas más idóneas que nosotros no logran un acuerdo al respecto.

y qué si el año se acaba.

0 Comments:

Post a Comment

<< Home