Friday, October 28, 2005

nosotros quemaremos con nuestros fuegos llenos de la lepra del sentimiento las madrigueras donde se esconden los acéfalos que trazan renglones ahí donde nuestras líneas se tuercen hacia lo que nos deja vivir en paz con el mundo y con nosotros mismos

nuestro fuego, nuestros huevos y nuestro amor que arrancamos y regalamos y nos quitan y se regenera como las colas de los lagartos; nuestro pequeño y victorioso cuchillo de amor contra sus titánicas fachadas que ocultan nada tras de nada tras de nada

morderemos con furia sus relojes

nosotros los chicos, los pocos, los ausentes omnipresentes

(para Fabi).

Friday, October 14, 2005

qué dispar compañía de parias y fenómenos, apretados en mi balsa de memoria, escapando del naufragio siempre inminente de mis ideas, pero mis ideas son la balsa y son el mar y son los blancos dedos temblorosos de la luna removiendo el agua negra que también son mis ideas

me golpea con su basta certeza el pensamiento optimista de que hasta vivir es una forma de matar a la muerte, el libreto de los días parece escrito por Billy S. con su pluma embebida en muerte y su catálogo de enfermedades del alma
una pausa en la voz de la conciencia que emerge como agua de un caño roto por los bordes de la baldosa, que inunda de cristalina obstinación hasta el último, ínfimo rincón

la obsesión es como un cactus que crece dentro tuyo

matar al tipo que jamás me deja solo, la compañía de la que habla Beckett, pero a veces hasta lo quiero un poco, tengo que admitir

subir, subir, subir el volúmen de los gritos y que en el sonido, en el medio, en el mensaje, en la histeria desatada se vaya la garganta con todo y sus patéticas cuerdas vocales a volar como polillas desde la misma vieja camisa que habito cada día